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miércoles, 22 de febrero de 2017

Chesse Cake Lemon Curl


Hace tiempo que me apetecía preparar algo con el limón como protagonista, así que, aprovechando que tenía un almuerzo familiar el domingo, decidí improvisar alguna receta. La idea era preparar algo cremoso pero con cuerpo, como una mousse. No me alegraba la idea de encender el horno, así que me decanté por preparar un semifrío. Ya que la nata como principal ingrediente cada vez me gusta menos, opté por una base de queso.
La verdad es que no soy especialmente bueno en experimentar con la repostería y como con estas cosas me gusta estar seguro, sobre todo si es para agasajar a los seres queridos, recurrí a un blog de referencia, Mi toque en la cocina, de mi amiga Deborah. Su Cheesecake de Limón me pareció perfecta para lo que yo andaba buscando en aquel momento, y la hice tal cual, con una pequeña variación en la cobertura. Ya que la tarta iba a estar un tiempo a temperatura ambiente durante su transporte, decidí añadirle una hoja de gelatina, así no perdería cuerpo. De todos modos, si se prepara en casa y vas a presentarla y consumirla allí, esta variación no es necesaria. Empecemos

INGREDIENTES (molde de 24-26 centímetros)
Base de Galletas:
  • 200 gr de galleta tipo maría
  • 150 gr de mantequilla en pomada (temperatura ambiente)


Relleno de crema de queso:
  • 300 gr de crema de queso
  • 75 ml de zumo de limón
  • 150 gr de azúcar
  • 400 gr de nata para montar
  • 100 ml de leche tibia
  • 6 hojas de gelatina


Cobertura Lemon Curl:
  • 1 huevo
  • 115 gr de azúcar
  • 115 gr de mantequilla
  • 1 hoja de gelatina (opcional)



ELABORACIÓN:
Primero hay que preparar la base, para lo cual vamos a triturar las galletas con la mantequilla en pomada. Cuando tenga una textura arenosa, la vamos a echar en el fondo del molde,  distribuyéndola lo más uniformemente posible. Puedes aplanarla con cualquier utensilio, por ejemplo, un vaso, como hace Deborah. Ahora metemos el molde en la nevera mientras preparamos el relleno de la tarta. Acto seguido, pondremos la gelatina a hidratar en agua fría durante al menos cinco minutos, o hasta que notemos que esté blanda.

Ahora prepararemos la crema de queso en varias fases. Por un lado, mezclamos el queso con el azúcar en una batidora de jarra convencional, hasta que se haya integrado y vuelto algo líquida la mezcla. Agregamos el zumo de limón y mezclamos un poco más. En ese momento, pondremos a templar la leche en un cazo para deshacer las hojas de gelatina. Acto seguido, la vertemos sobre la mezcla de queso y le daremos un par de toques suaves de batido para mezclarlo bien. De no hacer este paso rápidamente, corremos el riesgo de que la leche gelifique antes de tiempo.


Finalmente, montaremos la nata con una varilla eléctrica o robot de cocina, para luego volcar sobre ella la mezcla de queso, con cuidado de no bajar la preparación. Lo mejor es verter la mezcla de queso sobre la nata en tres veces y dando movimientos envolventes con una espátula. Siempre de abajo hacia arriba y desde el borde hacia el centro del bol. Si usas una amasadora eléctrica, ayúdate de la pala mezcladora y hazlo a velocidad baja (1-2 de 10). Una vez que veas que esté todo mezclado, vertemos la preparación sobre la base de galletas que teníamos reservada, para luego volver a meter en la nevera hasta que cuaje.

Una vez hecho esto, podemos pasar a preparar la cobertura de Lemon Curl. Para ello, hidratamos la hoja de gelatina en agua fría mientras calentamos el zumo de limón. Reservamos hasta el final. Mezclamos el huevo con el azúcar en nuestra amasadora hasta que resulte una mezcla aireada y blanquecina. Lo llevamos a baño maría, batiendo a mano hasta que la preparación adquiera la textura de una natilla, agregando la mantequilla en ese momento, en trozos y sin dejar de batir. Por último, añadimos el zumo de limón, en el que habremos diluido la gelatina. La mezcla estará algo líquida, pero cuando atempere un poco será más cremosa. Cuando veamos que la crema ha recuperado la consistencia de una natilla, la verteremos sobre la tarta.

Finalmente, dejaremos reposar la tarta al menos 6 horas, para que cuaje adecuadamente. Lo ideal, si tienes tiempo, es prepararla la víspera. Estoy seguro de que repetiré esta receta, porque me ha encantado su textura suave y aireada, aunque quizás la próxima vez pruebe a hacerla con otras frutas. ¿Con cuál te atreverías tú?



4 comentarios:

  1. Ya sabes tú que a mí todo lo que lleve limón y/o queso me gusta. :)

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    1. Pues esta propuesta esta muy equilibrada para mi gusto pero si tu vas a prepararla le tendras que añadir algo mas de limòn, incluso algo de ralladura en la base de galletas.

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  2. Esto no se hace que estamos comenzando la operación bikini, hombre!

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    1. Bueno un pedacito pequeño no se va a notar...será nuestro secreto mujer....ssshhhhh!!!!jajajjaajaa!!!!!!

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